Para muchos inversores, no tiene sentido realizar un seguimiento de los giros diarios del mercado. Su estilo de inversión es comprar acciones de calidad y luego aferrarse a ellas para siempre.
El gran inversor Philip Fisher en su libro Acciones ordinarias y beneficios extraordinarios, argumenta que el mejor momento para vender acciones es «casi nunca». Warren Buffett, el inversor más exitoso del mundo, también está muy familiarizado con el arte de comprar y mantener.
Si su objetivo es construir un flujo de efectivo sólido de cara a la jubilación, mantener algunas «acciones para siempre» en su cartera es una gran idea. Puede recurrir a sus acciones de dividendos para obtener ingresos regulares cuando lo necesite. Y cuando no necesite ingresos pasivos, estos flujos de efectivo se pueden utilizar para reinvertir y desbloquear el poder de la composición.
Las acciones para siempre pagan dividendos independientemente de lo que esté pasando con la economía general. Sus pagos sobreviven a picos y valles, guerras, depresiones y burbujas de activos.
Los productos y servicios de estas empresas son tan cruciales que no podemos imaginar una vida normal sin ellos. Esta cualidad ha convertido a estos negocios en cajeros automáticos que nunca se agotan. A continuación, los tres mejores ejemplos de esta categoría:
1. Coca-Cola
Coca-Cola, el gigante de los alimentos y bebidas con sede en Atlanta, es un activo ideal para mantener siempre. Mientras que muchas empresas recompensan regularmente a los inversores a través de pagos, rara vez encontrará una compañía que lleve repartiendo cheques de dividendos durante más de un siglo.
Esta impresionante trayectoria no oculta el hecho de que la venta de alimentos y bebidas es un negocio difícil que requiere innovación constante y una competencia brutal. Coca-Cola, en sus 128 años de vida, ha demostrado que su marca tiene un enorme poder para hacer frente a estas presiones.
Al igual que muchas marcas de consumo, Coca Cola también ha sufrido un duro golpe en sus ventas debido a la pandemia del COVID-19, ya que las ventas en parques de atracciones y teatros se interrumpieron con las medidas de confinamiento. Pero el balance de la compañía sigue siendo sólido, y su directiva confía en la posición de su liquidez.
En un momento en que los consumidores son más conscientes de su salud y se alejan de las bebidas azucaradas, la empresa está ampliando su oferta de productos saludables. Como parte de su esfuerzo por crecer más allá de su marca homónima y convertirse en una «empresa de todo tipo de bebidas», Coca-Cola está adquiriendo empresas de bebidas emergentes para mejorar su imagen para los clientes que se preocupan por su salud y encontrar nuevas áreas de crecimiento. Sus últimas inversiones incluyen Honest Tea, Fairlife dairy y Suja Life LLC.
2. Nike
El gigante de la ropa deportiva Nike es otro gran candidato para los inversores a largo plazo. La compañía cuenta con una sólida posición financiera y es capaz de soportar el debilitamiento proveniente de la pandemia COVID-19.
La fuerza de la marca Nike y la resiliencia de su modelo de negocio se pusieron de manifiesto con la exitosa ejecución de su estrategia de comercio electrónico durante la pandemia cuando la mayoría de sus tiendas tuvieron que cerrar. El director ejecutivo John Donahoe dijo a los inversores que las operaciones de comercio electrónico de la compañía siguen «en modo de crecimiento», a pesar del golpe a la demanda que supone el brote de coronavirus.
Analistas de Wall Street también han aconsejado a los clientes que conserven sus participaciones en Nike a pesar de que las ganancias se vieron lastradas durante la pandemia que obligó al gigante a cerrar sus tiendas. El fabricante de zapatillas Air Jordan está bien posicionado para el crecimiento a largo plazo, dado su fuerte reconocimiento de marca y la continua mejora de sus funciones digitales.
La tendencia hacia lo digital debería seguir «impulsando las ventas y la expansión del margen operativo en los próximos años», según la analista de Telsey Advisory, Cristina Fernández.
3. Verizon Communications
Las empresas de servicios públicos de telecomunicaciones abarcan muchas de las cualidades de un activo para siempre. No importa en qué dirección se dirija la economía, las conexiones inalámbricas y de Internet probablemente serán los últimos artículos que eliminarían los consumidores de sus listas de imprescindibles. Esta previsibilidad las convierte en acciones valiosas para mantener en su cartera de jubilación.
Verizon Communications, uno de los mayores proveedores de telecomunicaciones de Estados Unidos, es un excelente ejemplo de ello. La compañía ha reportado beneficios de forma constante, aumentando los dividendos durante 30 años.
Su dividendo trimestral de 0,6275 dólares por acción ha subido más de un 50% desde que las acciones de Verizon comenzaran a cotizar en el año 2000, tras la fusión entre Bell Atlantic y GTE. Sus acciones, que cerraron ayer en 60,37 dólares, están ofreciendo un sólido rendimiento anual del 4,14%, que no está nada mal si se compara con el rendimiento medio de sólo el 1,7% ofrecido por las empresas del S&P 500.
En conclusión
Siempre es un buen momento para comprar acciones para siempre como Coca-Cola y Verizon, y mantenerlas en su cartera. Las empresas con ventajas competitivas duraderas, marcas poderosas y posición de mercado arraigadas continúan recompensando a sus accionistas a través de dividendos. Están en una mejor posición para capear cualquier recesión económica y sobresalir a largo plazo.
Haris Anwar/Investing.com
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