El Dólar sufrió una fuerte baja ante las monedas principales y las materias primas el martes, con el Euro superando por momentos 1.1000, y la Libra quebrando 1.2700. El Yen tuvo un muy buen día, y quedó cerca de su mejor marca del mes en 147.15, en tanto la onza de oro tocó niveles que no visitaba desde mediados de mayo.
Si bien la cifra de confianza del consumidor del Conference Board quedó por encima de lo esperado, los discursos de tono moderado de diversos oficiales de la Reserva Federal hicieron trastabillar al billete en todos los frentes.
Los funcionarios fueron enfáticos al afirmar que la inflación está dando señales de bajar con firmeza, juzgando a la vez que la política monetaria del organismo ya se puede considerar lo suficientemente ajustada. Muchos evaluaron, a partir de estas declaraciones, que la Fed podría comenzar a recortar la tasa en el primer trimestre de 2024, después de haberla llevado de 0 a 5.5% en poco más de un año.
Los activos principales lucen sobrecomprados en el corto plazo, y no les será fácil mantener las ganancias que obtuvieron en la víspera. El Euro, la moneda insignia del mercado de divisas, llegó a su mayor nivel desde el 11 de agosto pasado, quebrando sin problemas la zona de 1.0965, que le había sido esquiva durante varios días. Desde 1.1005, la moneda única pierde posiciones, pero no se aleja de sus máximos. Es altamente probable que veamos una lateralización del precio durante las próximas horas, a la espera de las noticias más importantes de la semana.
En tanto, la Libra esterlina cotiza cerca de 1.2700, nivel que superó en medio de la caída del dólar el martes. Sin embargo, al igual que el euro, la moneda británica aparece agotada en los gráficos intradiarios, y la corrección bajista que ya ensaya podría extenderse a gran parte de la sesión del miércoles.
Por su parte, el Yen cumplió muy bien con una figura de triple techo en el gráfico de 4 horas, estacionando a escasos 15 puntos de 147.15, el mínimo del par USD/JPY de este mes. De esta forma, el dólar pierde casi 250 puntos que había recuperado la semana anterior, y se posiciona a la baja para los próximos días. Claro está, el Yen debe ameritar un movimiento en su favor quebrando los mínimos mencionados, aunque desde los fundamentales no hay motivos para que ello ocurra. El Banco de Japón no piensa cambiar su ultra laxa política monetaria, y tan solo una sensible caída de los rendimientos de los bonos del Tesoro podría justificar un crecimiento del Yen.
En otro orden, la onza de Oro se mantuvo muy firme durante la sesión del martes, llegando a 2042 dólares, una marca que lo posiciones no del todo lejos de sus máximos históricos de 2082 dólares del 4 de mayo pasado. La zona de 2050 dólares, nivel que tocó antes y después de tal máximo, aparece ahora como la principal resistencia. La sobrecompra de la onza impone una fuerte corrección bajista, que podría llegar en las próximas horas.
Como se ve, la caída del Dólar, masiva, parece algo excesiva y típica de un movimiento de alivio de los mercados, que anticipan un fin de ciclo de la Fed. Sin embargo, podríamos evaluar como exagerada tal caída, ante la falta de confirmación de que el banco central no vaya a aumentar la tasa en las próximas reuniones.
No extrañará ver, entonces, al euro regresando a 1.0930, a la libra a 1.2600 y al yen a 148.30, niveles que podrían servir como una plataforma de lanzamiento para mayores ganancias posteriores. La onza tiene un imán en 1922, muy lejos del nivel actual. No le quedaría mal regresar a la zona de 2015 dólares.
Este miércoles, el PIB preliminar del tercer trimestre en Estados Unidos y, más tarde, la presentación del gobernador del Banco de Inglaterra, Andrew Bailey, serán clave para el mercado.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el jueves.
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