Los inversores me preguntan a menudo cómo deben gestionar las acciones que han experimentado pérdidas a largo plazo que han durado semanas, meses o incluso años.
La pregunta fundamental que se hacen es cómo gestionar las posiciones perdedoras.
La respuesta es sencilla:
Depende.
No existe una respuesta única porque cada valor y cada inversor son únicos. Sin embargo, todas las estrategias deberían tener un punto de partida común: la inversión inicial.
La incapacidad para gestionar posiciones bajistas suele deberse a un error fundamental cometido al principio. Los inversores suelen ser incapaces de explicar por qué compraron unas acciones.
Las respuestas suelen ser erróneas.
- «Trabajo en esta empresa».
- «Mi primo/tío/amigo acaba de invertir en ellas».
- «Lo dijeron en la tele/periódicos/ web».
- «Ha bajado mucho, volverá a subir».
- «Ha subido mucho, seguro que seguirá subiendo».
- «Todo el mundo está invirtiendo en ella».
Estas justificaciones no se sostienen y, cuando las cosas empeoran, es fácil sentirse perdido.
¿Cómo gestionar las posiciones perdedoras?
El enfoque varía en función de si se centra en el corto plazo (como un trader) o en el largo plazo (como un inversor).
Si opera a corto plazo, una de las medidas más sensatas es fijar una orden de minimización de pérdidas. El viejo adagio del trading «Limita las pérdidas y deja que fluyan los beneficios», sigue siendo válido.
Otra opción son las entradas fraccionadas, que es muy distinto de posicionarse a la baja de forma aleatoria en cuanto a las pérdidas. Las entradas fraccionadas implican determinar la estrategia de antemano: cuánto capital invertir, cuántas entradas y a qué niveles o en qué condiciones.
Si las acciones siguen cayendo, basta con seguir la estrategia predeterminada.
Considere la posibilidad de vender con pérdidas para compensarlas. Las pérdidas forman parte de cualquier estrategia y no pueden evitarse. Si planifica cómo utilizar las pérdidas dentro de su cartera global, puede recuperarlas con ganancias en otras acciones, aprovechando las ventajas fiscales.
Por último, considere el aspecto del comportamiento, que a menudo se pasa por alto pero que es fundamental. ¿Una caída del 20%, 30% o incluso 50% del valor de las acciones le haría entrar en pánico, o puede mantener la calma?
Recuerde que algunas de las mejores oportunidades surgen durante mercados bajistas. Si entiende unas acciones, comprarla con descuento puede ser una gran elección.
Como ya se ha señalado, la planificación y la comprensión de las razones válidas para invertir en una acción concreta son cruciales. Invertir al azar no es una estrategia.
Francesco Casarella/Investing.com
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