Uno de los accionistas de Grifols (GRF.ES), Mason Capital Management, con un 2,1% del capital de Grifols, ha enviado una carta a la dirección de la empresa criticando tanto su gestión como su gobernanza corporativa, además de oponerse a la OPA de Brookfield.
Los accionistas de Grifols no están contentos
Mason ha solicitado al Consejo de Administración implementar diversas medidas para resolver los conflictos de interés en la compañía y mejorar su valoración. Además, Mason critica su historial de mala asignación de capital y afirman que “Desde 2014, cada operación mayor a 1.000 millones de euros se ha financiado íntegramente con deuda, aumentando en unos 4.500 millones de euros el endeudamiento de Grifols, mientras que solo han contribuido con 136 millones de euros en EBITDA”.
Además, Mason pone el foco en Tomas Daga, que ha asesorado varias operaciones de Grifols. Según la gestora «A pesar de haber incurrido en conflictos de interés flagrantes y destruir el valor de los accionistas, la familia y Tomas Daga otra vez podrían estar intentando aprovecharse de un Consejo débil”
Esto vuelve a poner de manifiesto el problema de gestión de Grifols, que pese a los cambios establecidos sigue generando dudas. La realidad es que el precio sigue bastante por debajo de lo que estaba antes de los informes de Gotham, por lo que por mucho que las casas de análisis le otorguen un potencial alto, la realidad es que el mercado no se acaba de creer el plan de Grifols.
Las acciones caen un 25% en lo que va de año.
Análisis realizado por los analistas de XTB